LAS SOBRECARGAS EN GEMELOS Y SÓLEOS: LOS DEMONIOS DEL CORREDOR!
Las sobrecargas es un mal de muchos y las que aparecen en gemelos y sóleo, son de las más comunes entre corredores. Por regla general, a los gemelos los tenemos bien localizados y sabemos cómo estirarlos y cómo cuidarlos; sin embargo, el sóleo es más desconocido y a menudo no le prestamos la atención que se merece. Cuando hablamos de sóleo, nos referimos al músculo que hay en la cara posterior de la pierna; es grueso, ancho y es el responsable de la flexión, extensión del pie y la elevación del talón. Está situado justo por debajo del gemelo.
Las piernas son las que aguantan toda la tensión mientras corremos y por ello es bastante habitual entre runners que aparezcan las sobrecargas en nuestras piernas. Gemelos y sóleo son especialmente «carne de cañón».
Pero, por qué se producen? Por distintas razones: un exceso de quilómetraje sin dar tiempo a la recuperación de nuestro cuerpo entre sesión y sesión, no dar importancia al calentamiento, por no realizar estiramientos antes y después, una mala técnica de carrera y/o un tipo de pisada que propicia dicha sobrecarga.
Importante será descansar para aliviar y recuperar nuestras piernas por un lado y por el otro, corregir nuestra pisada en el caso de ser necesario; utilizando una zapatilla que se adecúe a nuestras características o bien acudiendo a un especialista para que nos guíe y nos aporte soluciones.
Las zapatillas no sólo deben absorber el impacto, también tienen que ser las encargadas de mantener el pie en buena posición, respetando su forma natural. En algunos casos, y después de haber realizado el estudio correspondiente a nuestros pacientes, vemos la necesidad de incrementar la amortiguación en la parte del talón y estabilizarlo según si el corredor en cuestión es supinador o pronador. Con estas correcciones mejoraremos su pisada y conseguiremos eliminar molestias y futuras lesiones.
Y como prevención y lo que debería ser sabido por todos: los estiramientos deben ser parte fundamental de nuestras sesiones de entrenamiento. Debes realizarlos antes y después; de no hacerlo, tus músculos estarán siempre tensionados cuando vayas a correr, ocasionándote dolor, sobrecargas y a futuro, lesiones.
Y si por desgracia la sobrecarga aparece, imprescindible descansar! Los dolores no deben ir a más porque podrían derivar en una lesión. Las señales que emite nuestro cuerpo son muy sabias, escúchalas!!
Sólo te queda disfrutar…