LOS BENEFICIOS DE HIDRATARSE CON AGUA DE COCO
Empieza el calor y con la subida de las temperaturas, el riesgo de deshidratarnos por culpa de «un exceso de confianza»; y es que en esta época del año, cuando las temperaturas aún no son sofocantes, a menudo se nos olvida coger nuestro bidón o nuestro Camel Back para una sesión de entreno por montaña, por ejemplo. Y ahí pueden empezar los problemas!
Así como en invierno podemos aguantar perfectamente 90 minutos sin necesidad de agua, cuando las temperaturas empiezan a subir, la fatiga es cada vez mayor y en una sesión de entrenamiento habitual podemos deshidratarnos con relativa facilidad.
Hay que tener cuidado, así que hoy voy a hablaros de una bebida diferente (y que ahora está muy de moda!) y que os ayudará a sobrellevar vuestros entrenamientos veraniegos: el agua de coco.
Es curioso que, a pesar de que el coco como fruta tiene una pésima calidad nutricional por su elevado contenido en grasas saturadas (son las malas), su agua es muy rica en nutrientes, además de energética, y se ha comenzado a estudiar como una buena opción de bebida deportiva por su contenido en energía (glucosa principalmente) y electrolitos (sodio, potasio y cloro, entre otros).
Por su porcentaje en solutos (alrededor del 4%) y sus minerales (similares a los eliminados por sudoración), puede considerarse una buena bebida isotónica según el «Consenso sobre Bebidas para el Deportista» publicado en 2009 por la Federación de Medicina del Deporte (FEMEDE ).
Sin embargo, algunos científicos, y desde Nutriexper apoyamos esta opinión, piensan que por su riqueza en potasio (muy elevado) es recomendable enriquecer el agua con píldoras o tablets de sodio, ya que así aumentamos el porcentaje de este mineral que es el que mayormente excretamos mediante el sudor; eso sí, siempre que no superemos la dosis máxima de ingesta por litro y hora de 1.150 mg de sodio (las píldoras de sales o tablets habitualmente llevan entre 200 y 300 mg).
Así pues, los últimos avances sugieren esta bebida como una opción a tener en cuenta en nuestra práctica deportiva y que puede ser una alternativa a otras bebidas isotónicas, ya que a pesar de tener una concentración de glucosa del 3,7% y una pobre concentración de sodio, se ha visto que su agradable sabor estimula más su ingesta durante el ejercicio y es una opción más «natural» a las que habitualmente encontramos en el mercado.
Además, hay mil maneras de aprovechar las propiedades que nos brinda el agua de coco! Aquí va una receta de cómo utilizarla como recuperador después de un entrenamiento de resistencia: 600ml agua de coco, 20gr de cereales en polvo, 20gr de proteína hidrolizada (whey), y 10gr de cacao en polvo. ¡Hay que probarla, está riquísima!
Y es que de vez en cuando hay que experimentar y el agua de coco es un buen aliado.
¡Espero que os guste!